Es un hecho innegable que el número de instalaciones fotovoltaicas está en constante aumento en nuestro país, lo cual conlleva el riesgo potencial de incidentes relacionados con la utilización de aparatos electrónicos susceptibles de provocar incendios en estas instalaciones.
Durante los meses de verano, este problema empieza a verse acentuado por las altas temperaturas.
Según datos recientes proporcionados por Tecnifuego, la Asociación Española de Sociedades de Protección contra Incendios, se ha observado un fenómeno preocupante de envejecimiento en las placas solares ya instaladas. En muchos casos, estas instalaciones carecen de los requerimientos necesarios en cuanto a medidas de seguridad contra incendios. A esto se suma una falta generalizada de mantenimiento e inspecciones periódicas, lo que agrava el problema y dificulta aún más la prevención de este tipo de incidentes.
En contraste, en países como Estados Unidos, se lleva a cabo un seguimiento mucho más exhaustivo de estos eventos, que pueden ir desde incendios críticos hasta eventos de arco eléctrico.
En un post anterior discutimos posibles causas de los incendios y algunos dispositivos específicos, como los de ZBeny, diseñados para prevenir tales situaciones. Ahora, nos enfocaremos en recopilar los elementos intrínsecos de los sistemas fotovoltaicos que contribuyen a mejorar la seguridad de estas instalaciones.
Antigüedad y tecnología de los paneles
En numerosos casos, la longevidad de los paneles solares, combinada con un mantenimiento deficiente, representa un riesgo significativo de incendios en nuestras instalaciones fotovoltaicas. Es crucial reconocer que en el pasado, muchos de estos paneles apenas alcanzaban los estándares actuales de seguridad, y las instalaciones no estaban diseñadas para facilitar su mantenimiento, lo que aumenta la probabilidad de que dichos paneles presenten un riesgo de incendio en la actualidad.
Los paneles solares actuales, por el contrario, cumplen con rigurosas medidas de seguridad, cuentan con certificaciones apropiadas y están diseñados para resistir condiciones extremas, como las temperaturas altas del Sur de nuestro país. Además, problemas potenciales, como las roturas en los paneles, que pueden causar incendios de forma directa, se están subsanando con tecnologías capaces de evitar estas microrroturas.
¿Sabías que...?
Los paneles ABC de segunda generación de Aiko ofrecen un beneficio clave como es la restricción de la temperatura de punto caliente, que garantiza una temperatura más baja del módulo y un menor riesgo de incendio, especialmente en ambientes sombreados.
Protecciones contra arcos de CC y sobretensiones
En una instalación fotovoltaica, la corriente continua (CC) va desde los paneles solares hacia el inversor, donde se convierte en corriente alterna (CA) utilizada en los sistemas eléctricos convencionales. Durante esta transferencia, pueden ocurrir arcos eléctricos, descargas que saltan entre dos puntos de diferentes potenciales a través del aire. Estos arcos pueden generar altas temperaturas, lo que puede provocar la ignición de materiales combustibles cercanos como cables, conectores o componentes del sistema fotovoltaico.
Los arcos eléctricos pueden originarse por conexiones sueltas, daños en los cables, fallas en los componentes del inversor o incluso debido a la acumulación de suciedad o polvo que actúa como conductor. Una vez que se produce un arco eléctrico, puede propagarse rápidamente si no se controla adecuadamente, llevando a la ignición de materiales de alrededor y potencialmente a un incendio de gran magnitud.
Por otro lado, las sobretensiones son repentinos aumentos transitorios en el voltaje del sistema eléctrico, representan una amenaza tanto en el lado de CC como en el de CA de una instalación fotovoltaica. Originadas por diversos factores como rayos, conmutaciones en la red o incluso operaciones internas, estas sobretensiones pueden causar daños significativos a los componentes sensibles del sistema, incluyendo inversores, sistemas de monitorización y paneles solares. Además del riesgo de daño electrónico, las sobretensiones también pueden generar calor en los conductores y componentes, aumentando el peligro de incendios si la temperatura alcanza niveles críticos.
Actualmente, existen equipos que están preparados para evitar este tipo de problemas y aumentar la fiabilidad y seguridad de la instalación.
¿Sabías que...?
Los inversores de Auxsol incorporan protecciones contra sobretensiones y contra arcos de CC ampliando la protección del circuito para abarcar distancias de hasta 300 metros, añadiendo una capa extra de seguridad.
Sistemas antiincendios en los BESS
La adquisición de sistemas de almacenamiento de energía industrial (BESS) plantea preocupaciones significativas sobre la posibilidad de incendios en las instalaciones, ya sea provocado por la propia batería o por otros elementos de la instalación. Dada la novedad del fenómeno, la falta de experiencia en su instalación y gestión agrava este riesgo. Para mitigarlo, se requiere un enfoque integral: desde un diseño e instalación adecuados que cumplan con los estándares de seguridad hasta la implementación de sistemas de supresión de incendios efectivos.
La monitorización continua de las condiciones de la batería, la gestión térmica y la capacitación del personal en protocolos de respuesta ante emergencias son también fundamentales. Al mantenerse al tanto de las últimas tecnologías y mejores prácticas, las empresas pueden reducir el riesgo de incendios y garantizar la seguridad tanto de las instalaciones como del personal. Además, es crucial que los propios sistemas BESS incluyan sistemas antiincendios que puedan abordar situaciones en las que la batería se sobrecaliente o entre en contacto con una parte de la instalación en la que se produce un incendio.
¿Sabías que...?
Pixii Powershaper incorpora un sistema antiincendios dentro de su armario de baterías, diseñado para detectar automáticamente temperaturas anómalas o presencia de humo en el sistema. En caso de activación, este sistema de seguridad detendrá automáticamente el funcionamiento de la batería, mitigando así cualquier riesgo potencial de incendio o daño. Además, la alta calidad de los materiales de la envolvente ayuda a la supresión del incendio y a que no se propague fuera del armario.
Incendios en conectores en la parte de CC
Uno de los puntos más susceptibles de generación de incendios son las conexiones de MC4 en las zonas de strings. Un conector MC4 mal crimpado, no apto para ciertas secciones de cable, o directamente conectores de distintos fabricantes pueden generar importantes incendios en estas instalaciones. Además, las aseguradoras cada vez prestan más atención al tipo de conectores utilizados.
¿Sabías que...?
El utilizar la patente original de Multi Contact 4, por parte de Staübli, nos permite poder garantizar el MC4 con una mejor homologación para instalaciones europeas, garantizando una conexión de elevada eficiencia que nos garantizan un nivel muy pequeño de pérdidas y una mayor seguridad. Además, facilitan el acceso a pólizas de seguros dedicadas a instalaciones fotovoltaicas.
En resumen, cada componente de la instalación tiene el potencial de desencadenar un incendio si no se le lleva a cabo el mantenimiento y la supervisión adecuados. Por tanto, además de los sistemas de protección contra incendios que pueden estar presentes en cada parte de nuestro sistema fotovoltaico, es crucial mantener un control integral sobre el conjunto para prevenir estos riesgos y cumplir con los estándares de seguridad actuales.
