La degradación en los paneles solares es el proceso que afecta directamente a su vida útil, pero también al rendimiento a lo largo del tiempo, afectando directamente al retorno de la inversión a lo largo del tiempo. Por ello es muy importante entender qué es la degradación de los paneles solares y entenderla para rentabilizar al máximo nuestra instalación fotovoltaica.
Tabla de contenidos
¿Qué es la degradación en los paneles solares?
La degradación en los paneles solares es una serie de procesos que afectan al estado del módulo fotovoltaico, reduciendo su estado y rendimiento. Hay que tener en cuenta que la degradación no es un proceso aislado, si no que se produce por diferentes factores con diferente impacto.
El paso del tiempo como en todo, es uno de los principales elementos como la deslaminación o la posible corrosión que se produce en los materiales. Además hay dos factores clave a tener en cuenta, el LID y el PID.
¿Qué es el LID?
LID son las siglas de Light Induced Degradation o Degradación Inducida por Luz. Esta degradación se produce por reacciones químicas en la célula de silicio como la reacción del boro con el oxígeno que pueda quedar en posibles trazas en el proceso de extracción del polisilicio. Al exponerse a la luz el boro y el oxígeno reaccionan generando una estructura denominada «complejo boro-oxígeno» que reduce el espacio necesario para hacer pasar el flujo de electrones, conocido comunmente como «hueco».
Al reducirse esta espacio, es menor la cantidad de electrones que pueden pasar, afectando considerablemente al rendimiento, que puede llegar hasta una pérdida del 10% en el primer mes. El boro se utiliza para dopar las células tipo P, por lo que este efecto es más comun en ellas frente a las células tipo N que utilizan el fósforo para dopar el silicio.
¿Qué es el PID?
PID corresponde a las siglas de Potential Induced Degradation, o degradación inducida por potencia. El PID es producido por un fenómeno de polarización, que va provocando progresivamente un apagado de los módulos afectando seriamente a toda la instalación. Este fenómeno se produce por la existencia de tensiones negativas en las células respecto a tierra, produciendose corrientes de fuga de las células a otros elementos externos como por ejemplo el marco.
Las posibilidades de que ocurra este problema se incrementan cuanto mayor es la potencia de los strings y es más factible en situaciones de elevado temperatura o alta humedad medioambiental.
¿Cómo afecta la degradación de los Paneles Solares a nuestra instalación fotovoltaica?
La degradación afecta a la vida útil de los módulos fotovoltaicos, haciendo necesario un mayor mantenimiendo correctivo o incluso su sustitución pero la vida útil no es el único factor al que afecta la degradación. El principal factor sobre el que impacta la degradación es en el rendimiento, cuanto mayor sea la degradación menor rendimiento tendremos, lo que se traduce en una menor producción con el paso del tiempo.
Nuestra instalación perderá rendimiento con el paso del tiempo debido a la degradación, siendo cada vez menos rentable, ya que tendremos menor energía producida disponible para el autoconsumo o su venta y por lo tanto, el retorno de nuestra inversión sea mucho menor al deseado o al que podríamos tener con módulos de baja degradación.
Al fin y al cabo del retorno de la inversión y el rendimiento que le saquemos a cada instalación fotovoltaica es el principal fin por el que la hacemos. Aunque podamos tener otras motivaciones como ser más sostenibles con el autoconsumo, con una instalación fotovoltaica buscamos maximizar la inversión y generar beneficios o un mayor ahorro en nuestro gasto energético con el autoconsumo.
¿Cómo evitar la degradación de los paneles solares?
No tener degradación es algo imposible, con el paso del tiempo todo sufre una pérdida de rendimiento pero si que podemos hacer mucho por minimizar la degradación y maximizar el retorno de la inversión de nuestra instalación fotovoltaica. El principal punto a tener en cuenta está en el módulo que elegimos para nuestra instalación.
Hay una tendencia a mirar solo el precio y la potencia, sobretodo en residencial, pero apostar por un módulo de calidad es la mejor decisión posible. El proceso de fabricación, los materiales y la tecnología empleada en el módulo fotovoltaico son los elementos clave para una baja degradación. Aunque un módulo tenga un precio ligeramente superior, si su calidad se enfoca en una baja degradación, esa pequeña diferencia de precio se convierte en una gran diferencia en el retorno de la inversión a medio y largo plazo.
Así lo enfocamos en Pebblex
Con los módulos de Recom que distribuimos e integramos, como el modelo Lion, que ofrece una garantía en producto y rendimiento de 30 años con tecnología Anti PID y LID. Los paneles Lion ofrecen un rendimiento del 91,25% en 30 años, manteniéndose más estable con el faso del tiempo, lo que supone una gran diferencia frente a otros paneles con una fuerte caída de rendimiento a los pocos años y una fuerte degradación a largo plazo.
Además debemos de tener en cuenta las diferentes tecnologías que solucionan algunos factores que degradan los módulos como por ejemplo la tecnología Shingled que reduce la aparición de puntos calientes al no llevar soldaduras o las celdas TOPCon N-Type como la de los Lynx.
El diseño de la instalación es vital para garantizar el correcto funcionamiento y la baja degradación, organizando y conectando nuestros módulos y strings de la manera correcta y en general utilizando en todos los puntos de la instalación, el material con los requisitos de calidad y seguridad adecuados como hacemos en Pebblex.
También es importante llevar un mantenimiento adecuado de nuestra instalación para evitar que factores externos dañen los paneles solares. Una herramienta de diagnósis nos ayuda a identificar posibles problemas y tomar las decisiones adecuadas.
